El siguiente es un texto que Ricardo Galli publicó en su cuenta de G+.
Galli es argentino y su texto refiere a situaciones que se viven en España, país donde reside y es profesor universitario (Informática), además de ser el creador y responsable de Meneame
Si bien me hubiera gustado resaltar mas cosas en su texto, lo dejé exactamente tal cual está en el original.
Creo que vale la pena leerlo. No solo que vale la pena, que es imprescindible leerlo y, por sobre todo, asumir lo que dice.
Cuando en Argentina la democracia era un bebé, todas estas cosas que refiere se protegían. Había alarmas que ante los intentos de desestabilizar el proceso democrático nos ponían en marcha contra ellos.
Pero parece que la democracia en Argentina, al llegar a los 30, resulta ser un muchachote grande que debería irse de la casa de sus padres y es tratado en consecuencia. A cada rato le tiran en cara un 54% de algo, otra reforma constitucional, algún “ad hominem” o, la preferida, una “opereta”.
Pero bien, lo importante es lo que escribió Galli. Los dejo con el.
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Ser democrático es binario: o lo eres, o no
Si lo eres, acepta de una vez que hay ideas muy diferentes de modelos socio-económicos, que así como hay hijos de putas en todo el espectro, la mayoría de la gente no lo es, ni está pensando en cómo joder a los demás (o eso quiero pensar).
Si no lo eres, dilo claramente y sin rodeos, no te camufles en discursos pseudo democráticos y luego no admites ni el menor disenso, ni que quizás estés equivocado, ni que todos no pueden tener exactamente tu misma idea.
Mira, acepto que la democracia es sólo un consenso social, una elección de una forma de regir nuestra convivencia. Sé que que no existen democracias perfectas (Platón no tenía razon), que en su nombre, o aprovechándose de él, se han cometido muchos crímenes (desde el nazismo hasta invasiones a países, como Irak, basados en engañar a los votantes), sé que hay otros mecanismos. El problema es que no parece que haya otro mejor, al menos la historia no nos da una pista.
También puede ser que sólo a mí me parece que sea el mejor, en este caso explícanos cuál es tu propuesta, pero dilo claramente. No nos vengas con rollos de democracia, y luego afirmas que sólo con tus ideas y métodos se puede tener una democracia verdadera. Empezamos mal.
La característica fundamental de una democracia, más allá de la semiótica-genérica de “gobierno del pueblo”, es el reconocimiento a la diversidad de ideas, sobre todo de las políticas. Es decir, las ideas de cómo debemos organizarnos y convivir. De este reconomiento surge los mecanismos democráticos: es la gente la que decide entre varias opciones.
La clave es que hay diversas opciones, y somos “el pueblo” el que elegimos cuál o cuáles serán las que se lleven a cabo. Sin opciones, no hay democracia. Si no hay nada que elegir, no hace falta que “el pueblo” decida nada.
Es muy importante que este proceso permita a cada uno expresarse, disentir, criticar, oponerse, rebelarse. Para que esto funcione se tienen que establecer reglas que aseguren que tenemos esos derechos, y que no hay una propuesta política predefinida. Por eso, en democracia lo importante son los medios, no el fin.
Así, aunque esté de acuerdo con algunas o muchas de tus propuestas de sociedad, desde el momento que la consideras la única válida, y descartas cualquiera diferente, me generas una rechazo desde lo más profundo de las tripas, no puedo evitar sentirlo, y expresarlo. No quiero que tus ideas, ni las mías, se impongan haciendo desaparecer a las otras.
Lo que pasa es que te da miedo reconocer que quizás no seas democrático, que no admites el disenso, que no admites que puedes estar equivocado. O quizás lo sabes, pero no lo quieres decir, no vaya a ser que pongas a la gente en tu contra. Y ya se sabe, la gente es estúpida, y tú eres el guía que necesitan, pero si dices la verdad no podrías.
Así que, no me jodas, defínete. Si eres democrático, respeta estrictamente las reglas escritas y no escritas (o más bien, que no has leído) de la democracia, si no, eres simplemente un totalitario, o un fascista (en latu sensu, de derecha o de izquierda).
También deberías reconocer que las ideologías no son blanco y negro. No es lo mismo un Fidel Castro que Kim Jong-Un ¿no? Tampoco es lo mismo un neoliberal de la Escuela de Chicago que un keynesiano, ni un Tea Party es igual a los Demócratas, ni al PSOE. No simplifiques las ideologías a sus extremos, o a uno de ellos, que ya cansa que traten a los lectores como a niños (sobre todos los pseudo pensadores-todólogos de izquierda [*] que no dejan de repetir “neoliberales” y luego matarían por una entrevista a Krugman).
[*] Lo siento si ofende que critique a la izquierda, pero lo que más leo.
La próxima que diseñes un eslógan, o un hashtag, piensa si éste representa la “democracia real” que dices quieres conseguir. Porque exigir, por tus huevos, que miembros electos dimitan, y que se elabore una constitución nueva con una lista que habéis elaborado unos pocos en un parque (fumados o no), no tiene nada de democrático.
Te otorgo una enorme autoridad moral (al menos sobre mí) por haber ido a Neptuno a manifestar tu descontento y enfrentarte a una policía con ganas de dar, y a grupos con ganas de montarla. Pero no aplaudo lo que estás gritando, no es nada democrático. No sé si te das cuenta, no sé si sabes que además de las contradicciones de fondo es mala estrategia, que sólo debilita y causa rechazos irrecuperables (de hecho ya causó demasiados abandonos).
Reclamar derechos sociales, sí. Reclamar un sistema donde primen las personas sobre las grandes empresas, sí. Reclamar que se adelanten elecciones, también. Reclamar que discutamos el sistema electoral y la constitución, también. Hacerlo en la calle y gritando porque pasan de nosotros, también [**]. Pero alerta con tus propuestas de “coordinadoras” (elegidas por quién sabe quién, y cómo, es decir, no representan a nadie más que esos pocos) y algunos de su eslóganes. No vamos demasiado bien encaminados. Más parece que quieres imponer tu modelo por métodos alternativos, ya que el democrático no parece funcionar (no, no funciona del todo bien, necesita reajustes importantes, eso ya parece obvio).
[**] Eso síes son sólo una manifestación de apoyo, no son una “autorización”, ni indican que sean las ideas correctos, ni siquiera compartidas por la mayoría.
Ah, por cierto, también es absurdo que los objetivos, consignas y gritos sean de “dimisión de todos los diputados”, y que salgan diputados en activo afirmando que sólo es contra el gobierno, no contra los diputados de la oposición (i.e. ellos). Y que encima se les aplauda por decir eso. ¿No era acaso contra todos? Digo, porque hay alguien pescando en río revuelto. Tanto cinismo y oportunismo político también me revuelven las tripas.
En fin, ponte de acuerdo, si dices que eres democrático, demuéstralo, empezando por tener un mensaje y discurso claro. Que se dicen muchas gilipolleces por no meditar antes, o hay muchos con problema cognitivos importantes, o estáis entrando ya demasiado en el juego de unos pocos oportunistas.
Y sí, quizás sea un gilipollas pensando que la democracia es lo que debe prevalecer, y que se pueden solucionar sus problemas respetando sus reglas básicas. Pero al menos soy claro y transparente en lo que pienso, y me esfuerzo en ser coherente con ello, sin callar nada que no me guste. ¿Y tú?
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