Hasta el viejo Hospital de los muñecos joputas,
llegó el pobre Pinocho mal herido,
un cruel espantapájaros bandido,
el inexorable paso del tiempo,
lo sorprendió durmiendo y lo atacó.
Llegó con su nariz hecha pedazos
y una pierna en 3 partes astilladas
y una lesion interna y delicada,
el médico de guardia lo advirtió.
Al viejo cirujano, Ilamaron con urgencia
y con su vieja ciencia, pronto lo remendó,
pero dijo a los otros muñecos joputas no internados,
todo esto sera en vano le falta un EL corazón.
(c) Luis Aguilé – Modificaciones: Javier Salinas
Todo llega, por suerte, todo llega.
2 comentarios
De niña me gustaba mucho esa canción.
Ahora me gusta un poco más.
No sé si reírme o llorarme. Esperemos que exista la justicia en el más allá, por que lo que es en el más acá, ni modo.
Saludos.