Educación = enseñanza + aprendizaje

Recuerdo de infancia: la discusión, casi bizantina, entre algunas de mis parientes mujeres mayores (madre, tia) y vecinas sobre los revoltosos del barrio. Que si eran maleducados o malaprendidos.
Y, leo como un deja-vu, estos posts:

Cosas que me gustaría que mis alumnos universitarios tuvieran claras
Cosas que me gustaría que mis profesores de universidad tuvieran claras

Para no hacer tan, tan largo el post, pasen y lean en ese orden, incluyendo los comentarios y seguimos.

Hay algo en lo que no me voy a meter y es en darle la razón a ninguno de los dos.
Porque, ambos bloggers, tienen algo de razón en muchas de las cosas que escriben y demasiado poca en las restantes.
Lo que es muy interesante de ver en ambos post es la ausencia total de autocrítica, parejita de ambas partes 😉
Los dos pretenden un modelo ideal de alumno – profesor. Y aquellos que no tenemos otra alternativa que vivir la vida sabemos que lo ideal pocas veces se presenta.

Por este motivo es que titulé el post de esta manera.
Porque la educación no es un profesor sabelotodo comunicando ni el estudiante es un recipiente que DEBE ser llenado.
Pero, arranquemos por el principio. ¿Donde empieza la educación?
En casa. Y ahi también empieza el chusmerío de la viejas, sobre el maleducado y el malaprendido.
Si el crio no cuenta con una familia (y lease aqui padre/madre, madre, padre, tutor, encargado, hermanos, lo que sea que tenga a su alrededor, no se malinterprete una familia tradicional, patricia y cristiana) que lo vaya preparando para luchar en la pelea de la vida, ese pibe ya arranca con mala pata.
No solo es muy probable que tenga problemas para aprender, sino también para enseñar, en el caso de que se dedique a ser profesor.

Este es buen momento para recordar al gran Ringo Bonavena, cuando decía ?Acá en el ring estás tan solo que cuando suena la campana, hasta el banquito te sacan.?
No se requirió una Universidad para que una persona simple como Ringo pudiera dar una muestra tan acabada de la forma en que se aprenden las cosas.
Y, justamente, esta es la crítica para el “alumno universitario”. Toda su filosofía parece depender de tener una Universidad a su exclusivo servicio, situación que, de darse, no la va a encontrar en ningún otro lugar ni en ningún otro momento.
Por el otro lado, el “profesor universitario” pretende que la sociedad le entregue una mansa vasija para poder llenar a su antojo con un conocimiento que, en muchos casos, pude que ni siquiera le sirva como plataforma para aprender a aprender.
Ni siquiera, y como se ve en el texto, se preocupa en lo más mínimo por denunciar las falencias del sistema educativo que lo precedió, del cual también es parte.

Aunque esta discusión se ha dado entre españoles, no deja de ser también un reflejo de la situación de nuestras universidades, de las cuales he sufrido tanto a profesores (por poco tiempo, por suerte) como egresados.
No me voy a poner a contar anecdotas, porque estaría escribiendo varios días, pero hay una que tengo que compartir y que creo que sirve como una postal de la poca gana que ponen los profesores en enseñar como los alumnos en aprender, dejando de lado la bendita “currícula”.
Cortita: para muchos (recalco, muchos) alumnos de una facultad de Informática de Mardel, una base de datos es MSSQL.
Y no es una discusión software libre / software privativo. Es una patética muestra de vagancia, facilismo e ignorancia, tanto de un lado como de otro.

El profesor, al final del post, lo dice clarito: “Que yo ya tengo trabajo y eres tú el que se está jugando el futuro: ponte las pilas”

Dejando de lado la mala onda con que lo dice, la frase encierra una gran verdad que, y como si fuera el “consejo del nono”, ese que tiene su único título metido en un armario sin ver la luz desde hace 20 años, hay que rescatar:

Sos vos el que se está jugando el futuro. Ocupate.

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2 comentarios

    • Fede el 9 de febrero de 2007 a las 12:17

    Leí ambas campanas y creo que concuerdo contigo en que ninguna de las dos está del todo bien… solo remarcan lo malo del otro lado.

    En mi caso, trabajo (de 4 a 6 horas, según las ganas de mis superiores… aunque en el recibo dice 6) en ‘la calle’, luego trabajo unas 2 o 3 horas más (si estuve 4 horas en la calle… nomás), y luego voy a la Universidad. Aclaro, el trabajo es por necesidad, no porque quiera (y aún así, hay meses en donde llego con fichas en vez de monedas).

    En la Universidad, privada si vale la aclaración, me encuentro con que me ponen la primera materia a las 8.40 y la segunda empieza a las 13.00 hs y por último me meten idioma a las 18.30 hs… (teniendo 3 materias!… y son 6 por semestre… estoy describiendo un caso lo más básico posible).

    Con lo que, dado que la Universidad está a 45 minutos del centro (porque decidieron mudarse a un Campus para VIVIR la VIDA UNIVERSITARIA cough cough…), no puedo volverme a mi casa entre materia y materia. Es decir, empiezo a las 8.40, tengo 80 minutos de clase… mas que vuelvo a mi casa y vuelvo a la Universidad… estuve unos ‘minutos’ en casa que no valen la pena.. más el costo de transporte. Y a la tarde… la misma historia. Con lo que la Universidad me impide que trabaje y estudie… (siendo que eso paga parte de la Universidad tambien..). Solución, dejar una materia.

    Dejo una materia, lo cual atrae la atención del tutor quien se comunica para ver porque dejo la materia. Caso inconcluso, argumenta que es la solución más rápida que pensé (sin darme otro tipo de solución) y me comenta de que no baje el nivel de estudio (haciendo peripecias con mis horarios, claro).

    Empiezan las clases, divertidisimo momento en donde todos los profesores te llenan de pedidos de fotocopias y libros y … y … con lo que luego voy y hago los encargos de cada uno de los items pedidos. Esto toma tiempo, y dinero… en una Universidad Privada (no hay una carrera con el mismo perfil en una pública, aclaro, ni en otra Universidad Privada del lugar…).

    Luego cierto día el tutor decide montar una reunión, y no hay mejor momento que ese en el que trabajo… santisima madre, a pedir que me dejen libre en esas horas del trabajo… ¿pero bajo que argumento?. Los argumentos posibles son exámenes (no), enfermedad (tampoco)… ¿Reunion con el tutor? no existe… la empresa NO lo entiende, por tanto no te deja asistir… nuevo llamado de atención por parte del tutor.

    Todo el mundo contento, vos estudiando para cazar todo lo que podés… llegás a la época de examenes finales y te encontrás con la grata sorpresa que dos de los exámenes se superponen…y por cuestión de costos… NO HAY MAS TURNOS. Debes dejar una materia para el próximo turno…

    De aclaración, una vez rendí a las 9 de la mañana un examen, y luego a las 11 el siguiente. Por alguna cuestión que desconozco, al salir de un exámen me suele doler la cabeza (Como que me hubieran machacado), con lo que el examen de las 11 lo hice bajo un padecimiento sin-palabras… y ni se imagen el oral.

    Luego están los exámenes orales, que el profesor que-te-tiene un poco de bronca (porque alguna vez le acotaste algo en clase, de manera educada y todo), te deja hasta el último minuto para rendir… eran 60 alumnos y cada oral no tomaba menos de 5 minutos… 60 x 5 = 300 minutos (minimo), de modo que son 5 horas de espera (5 HORAS!) y no… no te avisan nada que podés ir y volver más tarde, simplemente porque la Universidad queda a 45 minutos del centro… y si te vas,, te bochan. Pasas entre los últimos 5 que rinden y claro… estás quemadisimo. Y el profesor no tiene mejor idea que ponerse a tomar un café y unas medialunas frente a vos… mientras vos estas muriendo de hambre, y el tomandote un examen mientras se rie con la compañera de trabajo… ¿COMO? si… se rie, de que? no se… de mi? no se!…

    Conclusión de un examen oral asi…bochazo.. pese a que en el examen escrito tenias un 90%… en el oral… te tapan la boca poniendote un 2…(si, un 3 te daría un poco más de promedio…

    Son cosas que pasan en las Universidades, y lamentablemente en este país, mucha gente no entiende. En mi Universidad, el 75% del alumnado recibe ayuda de los padres, de los cuales un 10% realmente aprovecha la oportunidad mientra sque el resto despilfarrra guita a mansalva en jodas… boliches…etc (tienen derecho a divertirse, pero también obligación a estudiar… obligación en forma de voluntad,,, o al menos asi deberia ser). Luego, del 20% que se banca los estudios, el 100% de estos se rompe el … día a día tratando de llegar a rendir al máximo, llega cansado y el profesor le hace la joda “de fiesta, no??…” ( claro… de fiesta con mi jefe hasta las ultimas horas de la noche festejando con informes!!!..). Luego queda un 5% que está becado, es decir, la Universidad explota su tiempo (hasta las veces de peor que alguien que trabaja fuera), y les ‘da’ un 25% de descuento… (nada! los explotan!)… eso si, están ahi en la Universidad… como único beneficio y conocen a los profesores.. pero ojo, muchos becados sufren de los profesores que creen que porque están becados necesitan saber y esforzarse más (¿?), con lo que los exámenes son una gota de sudor por segundo para estos sujetos, y si rinden mal… pierden la beca…. y muchos, no tienen otra posibilidad para estudiar (a menos que consigan trabajo, algo dificil cuando no tenés titulos… a menos que alguien te ayude a ubicarte en una empresa, como fue mi caso).

    La realidad de una universidad privada en Argentina… al menos la realidad que veo con mis ojitos durante todo el santísimo año…

    Saludos,
    Fede

    p.d: me gustó mucho el diseño nuevo 😉
    p.d.2: te debo la continuación de La Torre en T_T 😀

    • Javier el 9 de febrero de 2007 a las 17:20
      Autor

    Fede:
    La verdad que esa universidad da para hacer un blog entero publicando todos los días cada una de las pelotudeces que se mandan 😛
    La verdad, no tengo mucho para decirte. Solo podría comentarte que podrían ir juntandose varios que están en tu misma situación y averiguar si cualquiera de esas situaciones pueden encasillarse en las situaciones previstas en la ley de defensa del consumidor (24240), ya que en este caso, al ser una empresa privada la que brinda el servicio educativo por una retribución monetaria, deberían disponer de un “contrato” entre partes, con los derechos y obligaciones de cada uno.

    Respecto al diseño, lo único que yo hice fue elegirlo 8) . Los créditos, abajo.
    Sobre la torre, no te preocupes, soy paciente. Sobre todo ahora, que la torre se ha hecho descomunal y es dificil de sostener hasta para los que la construyeron 😈

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