Arteaga no termina de entender

Juan Jose Arteaga, Director de Tránsito de la Municipalidad de General Pueyrredón, se largó a hacer declaraciones. De esas que la mayoría de las veces, si hubiera tenido alguna otra cosa que decir, se las hubiera callado.
Todos sabemos que el tránsito de Mar del Plata es caótico con pronóstico de empeoramiento.
Todos sabemos que la solución definitiva no es cosa de un día para el otro, sino que implica decenios de concientización vial.
Todos sabemos que el Departamento de Tránsito adolece de múltiples limitaciones presupuestarias, que van desde funcionar en un galpón a punto de colapsar, pasando por la falta de uniformes, motos, gruas y etcs. múltiples.
Pocos (para no decir yo solo) hemos denunciado el rascadero de higo permanente del personal de esa repartición, basado en estadísticas oficiales publicadas con fanfarria y aroma a logro heroico.
Y por si esto fuera poco, publica hoy el periódico online mdphoy.com publica la forma de “revertir la situación” que plantea Arteaga:

En ese sentido el director de Tránsito destacó que la única forma de revertir la situación es el aumento del monto de las multas: “una doble fila debería costar $ 1000 y un semáforo en rojo entre 3 y 5 mil pesos”.

Veamos un par de soluciones posibles, a implementar todas juntas, para que nadie diga que antes de hacer tal cosa tendría que hacerse tal otra.

Aumentar la productividad del personal. No son necesarias horas extras, ni mas gruas ni mas motos ni mas empleados. Con solo empezar a hacerlos mover el culo para que no esté permanentemente pegado a los asientos de las pocas motos sería un buen comienzo. De esta forma, el nuevo personal, las nuevas motos y las nuevas grúas ya empezarán a cumplir su función mas eficientemente cuando lleguen.

Mandar a los infractores a hacer los cursos que nunca tuvieron. Aunque la gran mayoría de los conductores no saben como se deben comportar, los que lo demuestran y son detectados pueden pasar por el aula. Y endurecerles las penas recién si reinciden. Pero no solo con una multa mas grande, sino con mas horas de curso también.

En la parte económica, tampoco sería una mala idea que la reincidencia sea el disparador para una escala de multas porcentuales al valor del vehículo. No tengo estadísticas a mano, pero la percepción de mi propia experiencia me muestra que cuanto mas alto es el valor del auto, mas desaprensivo se muestra el conductor.
Obviamente, reglamentar la ordenanza del registro con puntaje, que hace dos años espera en el cajón de su jefe, tampoco hará que aumente la alopecia en el gabinete municipal.

Implantar la materia Educación Vial en los colegios municipales y proponer al Gobierno de la Pcia. para que haga lo mismo.

Evitar que los colectivos, taxis y remisses dejen de ser intocables. El colectivo que va por el carril mas separado del cordón en una avenida es tan infractor y peligroso como el que se estaciona en las paradas. El taxi que espera en doble fila que se haga un lugar en su parada es tan infractor como el remisse que aun con la cuadra vacía para en doble fila para salir mas rápido o el que se detiene a comprar algo y se justifica diciendo “es un minutito, nada mas”.

Ver las cosas como son: si le parece que una doble fila amerita una multa de 1000 pesos, no puede pedir 3 o 5 mil para un pase de semáforo en rojo. De mínima, 10 mil para arriba.

Esto último también da una pauta del porqué Arteaga parece no terminar de entender el problema que tiene en sus manos resolver. Ni el mismo tiene en claro la diferencia entre retrasar el tráfico y arriesgar una o varias vidas pasando un semáforo en rojo.
Pero bueh, como dicen ahora, es lo que hay.

Compartir via ...Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on email
Email

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.