Crónica de un fracaso anticipado

La noticia es : “Claudia Rodriguez asume como Directora de Tránsito” y la nota con sus declaraciones que publica Loquepasa.net es una pinturita para apreciar y sacar conclusiones.

Claudia Rodriguez es una marplatense que fue campeona mundial de patín carrera, en varias ocasiones, entre los años 79 y 89. Leamos los motivos de su ingreso a la política y mas precisamente, al partido (in)Acción Marplatense, desde sus propias declaraciones a la revista Training Time, en el año 2007

Después de mi retiro activo de la práctica del deporte competitivo, me pareció una buena forma de ocupar mi tiempo ocioso, poner la experiencia recogida a través de la competencia, los viajes y demás al servicio de la comunidad. Se me presentó la oportunidad de participar en una reunión de Acción Marplatense, ellos se mostraron interesados por el deporte de la ciudad, y ahí fue que me transformé en una militante política

Ya podemos ver un poco cual es el estilo de esta chica. En vez de hacer un curso de decoración de tortas, ocupó su tiempo ocioso con la participación política, en un partido al que le interesó ella y no en un partido que a ella le interesara.

Sigamos viendo a algunas de las declaraciones publicadas en loquepasa.net:

“Se que hay mucho prurito en torno a si tengo la capacidad o formación para estar a cargo de Tránsito. Yo mismo me lo he planteado pero me parece que una buena relación con el personal y con el vecino nos permitirá llevar adelante una buena gestión”

Nadie habla de su propia falta de capacidad si no es un tema que sea recurrente.
Para quienes hemos tenido la ocasión de verla muchas veces en las reuniones de la Comisión de Transporte, aunque no de escucharla opinar en las mismas con la misma frecuencia, no deja la impresión de ser la persona adecuada para hacerse cargo de un sector del empleo municipal caracterizado por las presiones, los juegos de intereses y la vagancia escandalosa de los empleados de Tránsito.

La buena relación con el personal no la va a salvar de que cuando llegue el momento de que le hagan un planteo, ya sea porque las camperas están gastadas, las motos en el taller o los chalecos no reflejan la luz, igual que como se lo hicieron a sus antecesores, con retenciones de tareas y hasta algún que otro escandalete estilo de “Rodriguez llamó al jefe para decirle que no le haga la multa a un infractor”, como le ha sucedido a varios de sus antecesores.

La buena relación con el vecino le alcanzará para no recibir caras de culo cuando saluda al irse de su casa, pero en vista de la pelota que le da el gobierno de Gustavo Pulti a los vecinos, no le va a servir de nada para manejar esa dependencia.

Otra declaración, ésta dedicada a los pibes, a esos a los que los viejos les rompemos el coco diciéndoles que estudien, que se capaciten, que sean serios y responsables en aquello que han elegido para obtener el sustento diario:

Estamos bien si tenemos esa comunicación y no necesitas ser un sabiondo del área porque confío en el personal que hace muchos años esta trabajando en Tránsito y tiene esos conocimientos

Claro, dale que va. Lo mismo un burro que un gran profesor. Si lo único que necesita el burro es tener el teléfono del que sabe y ya está. Director de algo.

¿Asi pretende esta chica ordenar, primero, la dependencia cuyo presupuesto tiene entre el 95% dedicado al pago de sueldos y luego el caótico tránsito de Mar del Plata?
¿Sabrá esta mujer y el intendente que en muchos países existe la carrera de Ingeniería de Tránsito o que en Argentina hay una Sociedad Argentina de Ingeniería de Tránsito?

Ya a punto de cumplir los tres años de no gestión, este intendente ha tenido que poner a gente de otros partidos en los puestos mas técnicos de la Municipalidad. Un socialista en Hacienda, luego de pelearse con un radical. Otro radical en obras, uno del Frente para la Victoria en desarrollo productivo, otro peronista en Obras Sanitarias …
Tras 18 años de ser concejal intentando llegar a ser Intendente, dos veces en forma fallida, la tercera exitosa con “una ayudita de mi amigo”, Pulti no pudo conseguir que su propio partido tenga los cuadros directivos preparados para asumir en los puestos que alguna vez iba a tener que cubrir y que finalmente le tocó a finales del 2007.

Y para peor, después, cuando decimos que son unos inútiles, encima se enojan.