Primeramente, se debe recalentar la sartén por medio de una represión a docentes y municipales. Luego, haga un cambio de gobernador y permita que todo sin cambios.
Tomese a una Ministro de Desarrollo Social y ubíquela en la sartén, mas precisamente, almorzando en un lugar público con la mejor cara de “yo puedo caminar libremente por mi ciudad”.
Si la Ministro se quiere seguir moviendo de esa manera en la sartén, dejela. Esto aumenta el nivel de temperatura.
Espolvoree con harina y agregue media docena de huevos mientras la Ministro se mueve en la sartén sin permitir que se suba a la espumadera.
Posteriormente, decore con una curita en la sien, al lado de las fotos que la muestran enharinada sin un solo rasguño.
Marine todo en una conferencia de prensa en la que, mientras anuncia que se banca la harina y los huevos, se agarre el pecho con cara compungida y a punto de llorar mientras dice “tengo un dolor aca….” . Preguntesé cuanto dolor tendrán la mujer y los hijos de Fuentealba.
Su receta para encontrar una hija de puta ha sido exitosa.